miércoles, 9 de marzo de 2011

Periodistas en el Congreso de Mujeres

La problemática de la violencia y el narcotráfico no fue lo único que me llamó a la reflexión de este Congreso. También, desde sus distintas experiencias, los discursos de periodistas como Esther Vargas, (Peru 21), quien dirige el sitio Clases de Periodismo, y destaca el poder y valor que tienen los blogs y redes sociales para abrir espacios y "dar voz a los que no tienen voz". Y en contraparte, la preocupación de Leila Guerreiro (del periódico La Nación de Argentina), de que la loca carrera por publicar la información antes que nadie, vaya en detrimento de la calidad de lo que se está escribiendo para y/o en internet.

"El relato periodístico no tiene parangón en internet" dice Leila Guerreiro, no hay tiempo para las formas, para el "cómo contamos las cosas". El periodismo narrativo, genero al que ella se dedica, no tiene cabida en los medios digitales. La pregunta que me quedó en el tintero es, si esta tarea no está siendo ejercitada a través de espacios como los blogs, donde es posible escribir bajo la presunción –o al menos bajo la esperanza– de que el lector no nos abandonará sobrepasados los primeros 500 caracteres (o los 24, en tiempos twitteros).

La preocupación es válida y compartida. Me tocó lidiar con ello, cuando era editora de Mundo52 (sitio de estilo de vida del periódico El Economista), y tuve que entrenarme y adecuarme al nuevo formato. Y la preocupación la sigo teniendo hoy, cuando veo que otros medios en los que colaboro, como las revistas en papel, también tienen que "aggiornarse", "recortar" y "pedacear" la información antes de entregarle a los lectores un artículo "pre-digerido" que responda a sus necesidades y a los nuevos tiempos.

¿No estaremos acaso subestimando a los lectores? ¿De verdad ya no somos capaces de leer más allá de los mil caracteres? En el congreso también se habló de la responsabilidad social del periodismo, que a mi criterio implica no solamente la valiosísima labor de ir a la trinchera, o poner en riesgo la vida reporteando temas tan trascendentales como el narcotráfico; sino la responsabilidad de propiciar con nuestros textos, reflexiones sobre la realidad. Tendremos que encontrar los caminos para seguir haciéndolo con las nuevas herramientas.



Congreso de mujeres y el ejercicio de pensar más allá



"Think a little bit further". Hace unos días me desperté con esta frase en la cabeza. Algo extraño despertase con un pensamiento en otro idioma, pero describía perfectamente lo que me estaba sucediendo, aunque no sabía bien a bien cómo ponerlo en práctica en ese momento. Pensar, pensar más allá de lo cotidiano, poner a trabajar la neurona y ocupar la mente con razonamientos más complejos que las tareas pendientes para el día, del trabajo, de la casa, de las niñas. La respuesta llegó con la sugerencia de una amiga de asistir a un congreso de mujeres que se está llevando a cabo en estos días en la ciudad de México: "La experiencia intelectual de las mujeres intelectuales del siglo XXI" es el sesudo título del encuentro.
Me inscribí y asistí ayer. Disfruté de oir hablar a editoras y periodistas acerca de sus experiencias, pero sobre todo me maravillé con la valentía y sensibilidad de Judith Torrea, quien escribe el blog Ciudad Juárez en la sombra del narcotráfico y se atreve no sólo a hacer una labor periodística tan riesgoza en este país y sobre todo en Juárez, sino también a cuestionar a viva voz y en un foro como este (organizado por la CONACULTA), la política de la "supuesta guerra contra el narcotráfico" que encabeza Calderón.
"Los muertos los pone México, los pone Juaritos, mientras los verdaderos narcos disfrutan de una apacible vida del otro lado de la frontera, en El Paso, o en Nueva York", dice Judith. "Cuando alguien muere en Juárez la respuesta de las autoridades es decir que estaban ligados al narcotráfico". ¿Y si sí lo estaban qué? se pregunta Judith. ¿ No merecen justicia esos jóvenes que no tuvieron elección, que no tuvieron oportunidad de dedicarse a algo más que al narco, en una ciudad en la que 10 mil comercios han tenido que cerrar y en la que hay más de 150 mil casas abandonadas a causa de la violencia?
Una ciudad que se está convirtiendo en un "pueblo fantasma", en la que 10 mil huérfanos a causa de la violencia no tienen escuelas ni oportunidades, una realidad en la que si no intervenimos lo más probable que "se conviertan en futuros sicarios". Impecable y sobre todo movilizante la intervención de Judith. Un buen punto para empezar a ejercitar esto de pensar más allá, más allá de las "percepciones", más allá del discurso oficial, falso por cierto, de que hay una guerra justificada y que esta guerra se está ganando...

martes, 9 de octubre de 2007

Declaración de principios

Mercenaria, obrera de las palabras y las notas por encargo, llenando caracteres, paginas o líneas agata. Eslabón débil de la escabrosa cadena del periodismo utilitario. Igual infiltrada en el mundo gastronomico, que en el frívolo espectro de las cremas anticelulitis. Así trascurren las letras y desfilan mis palabras: hoy ocupada del trastorno bipolar y mañana tratando de bajar a tierra el discurso delirante un artista plástico. Robándole segundos al sueño para garabatear una canción de cuna a mi hija en medio de la noche o sintiendo que le resto espacio-tiempo mental a mi trabajo asalariado al teclear estas líneas. Pero por salud mental y vocacional necesito hacerlo, aunque sea un breve ejercicio sináptico, un escape creador que me permita conectar obligación y goce. Así me nació la idea de El lado B de las cosas, porque necesito creer que estas neuronas pueden rescatar algo más de los encuentros con temas y personas, que los 3000 caracteres que exigirá el editor en turno.
Veamos que sale de todo esto.